Mujeres

Faltando tan solo algunas horas para el advenimiento del 8 de marzo, día internacional de la mujer: será cuestión de contar alguna historia sobre alguno o algunos de estos seres extraños y misteriosos, cuidando de no tropezar a fin de no ser fulminados por el rayo terrible de su mirada y su desaprobación.
Lucy y Marie Noèl

Sacaré punta al lápiz y a la memoria para dar testimonio de dos hembras singulares, extrañas y peligrosas del acontecer callejero de París.
Lucy y Marie Noèl pasan largamente del medio siglo, casi que acercándose a los tres cuartos de siglo.
Lucy delira en su extraño papiamento mezclando palabras en: francés, castellano e italiano.
Marie condena a saco al francés de barrio.
Lucy presume(alguna cerveza de por medio) de su relación con la camorra napolitana.
Marie escudriña los puntos de reciclaje y reparte su botín entre los mercaderes del centro.
Lucy se escapa en invierno al sur de Italia para reaparecer cada marzo.
Marie se esfuma con las primeras lluvias de noviembre como la niebla en París.
Lucy y Marie Noèl sacan chispas cuando se juntan, vuelan los gritos y las patadas, los tirones de pelo y las bofetadas. Es mejor no estar cerca cuando sucede, aunque si las ves por separado, hasta podrían resultar encantadoras.
Pobre de el que se haya cruzado con alguna de ellas en su estado larval, seguro que ya es historia.
Lucy y Marie son mujeres potentes, auto suficientes y auto delirantes. Da la impresión de que siempre han estado aquí, antes de la guerra, antes de Napoleón, antes de la revolución y aun antes de Vercengetorix.
Lucy te monta una escena por cualquier desavenencia y te amenaza con la mafia.
Marie Noèl ya pinchó a uno con una aguja de tejer por diferencia de opiniones.
Cuida que ninguna de ellas se enamore de ti, en ese caso te conviene mudarte de ciudad, de país o de continente, o mejor aún, de planeta.