Giraba la estación orbital llamada
“SATELITÓN” al rededor de una esfera azul al centro de la Vía
Láctea. Tenía entre sus instrumentos junto con un detector de
emociones, un detector temprano de anomalías genéticas que
transmitía inmediatamente los datos al centro de mando de la cruzada
planetaria. La gran cruzada correctora de
mutaciones llevaba ya largos años celebrándose desde que el
emperador “Mongo” (ahora ya derrocado) quitara las ayudas
sociales y destruyera la estructura social de la mayoría de las
naciones de “Esfera azul” y las dejara en las garras de los
siniestros dictadores financieros.
El gran Guasón practicaba desde el
estudio central los golpes de efecto para sacar los”Drácmias” y
centavos de los habitantes de Esfera azul mientras iba eligiendo los
casos mas dramáticos de mutaciones para presentarlos como
espectáculo desgarrador en la gran noche de la farsa en donde desde
su catedral, entre llantos y gritos histéricos conminaba a los
fieles a desprenderse de sus plasti-créditos.
La noche de la gran farsa era un
momento esperado por todos, la gran Satelitón vaciaba las calles de
Esfera azul, solo funcionaban los bancos y cajeros automáticos a
donde concurrían los fieles a depositar su inocencia a la cuenta de
las grandes corporaciones que contabilizaban desde el satélite la
lujuriosa astucia de los dictadores financieros y preparan cruces de
acero inoxidable y clavos de titanio para crucificar a cualquier
detractor de la gran farsa planetaria.
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