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viernes, 10 de octubre de 2014

Secuestro exprés y supercherías



Supercherías

Para entender como y porque la colonización de América no fue mas que una suplantación de valores y supercherías es importante tener en cuenta que los conquistadores jamas aprendieron las lenguas americanas, se limitaban a usar traductores indígenas cuando no simplemente comunicaban sus intenciones y exigencias directamente en castellano leyendo decretos y dando los tramites por cumplidos para darle una validez legal a sus abusos a gente que no entendía ni una palabra. Tampoco intentaron jamas aprender o intentar entender siquiera acerca de las creencias de los pueblos de América
Durante el primer encuentro de la gente de Pizarro con el inca, un fraile que viajaba con el grupo se acerca al rey levantando una biblia en la mano y exigiéndole que renuncie a sus rituales paganos, que esa era la palabra de dios. Atahualpa pregunta al traductor para enterarse de lo que habla el insignificante hombrecillo. Intrigado por la respuesta le arrebata el estúpido libro y lo acerca a su oído, al no escuchar nada lo arroja lejos con desprecio gritando que no se sometería a una religión de la que ignoraba todo y que ademas deberían pagar lo que habían arrebatado en su tierra.
Esto sirvió de excusa a Pizarro para llevar a cabo el primer secuestro “exprés”. De las américas.
Atahualpa le ofreció si lo liberaba, una habitación llena de oro hasta donde alcanzaba su mano y dos de plata. Este ademas del secuestro mas caro en la historia, se convirtió en una de las primeras grandes traiciones pues los españoles lejos de liberarlo, lo asesinaron ahorcándolo en nombre de un absurdo y desconocido dios que hablaba desde el papel en una lengua desconocida y extraña.
Si bien en algún momento sacaron la espada que clavaron en el corazón del continente, la cruz quedó clavada hasta nuestros días, sigo esperando el momento de poder sacarla y arrojarla lejos como hiciera el último inca con su absurdo libro.


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